Un domingo cualquiera, con niños en Urkulu.

Después de andar toda la semana como una loca de allá para acá, llega el domingo. Un día perfecto para hacer planes en familia. En Euskadi, este día de la semana es sagrado. Porque normalmente guardamos los planes para el domingo y si sale un rayito de sol, ni te cuento. En casa no se queda ¡ni Kristo! (expresión muy típica). Salimos todos “escopetados”, para ponernos como lagartijas, al sol.

Hoy quiero que conozcas un lugar perfecto para disfrutar, en mi caso en familia. Es un lugar mágico. Por su especial belleza, por el aire fresco que respiras allí, porque hace que desconecte y se me carguen las pilas… Y lo tenemos aquí mismo.

En el mismo valle de Debagoiena y a pocos kilómetros de distancia de Arrasate-Mondragón, tenemos uno de los principales atractivos naturales de la comarca. Este sitio se llama Urkulu. Sí, solo con una “l”, que Urkullu es el señor Lehendakari (el presidente de Euskadi), para que no haya ninguna confusión.

Urkulu es un embalse artificial, que pertenece al municipio de Aretxabaleta (Guipúzcoa) y que se construye con el objetivo de recoger el excedente de agua, que mayormente viene del río del mismo nombre y diversos riachuelos procedentes de las montañas de alrededor, que son muchas: Kurutzeberri (1.117 m) , Elorretako-Aitza (1.125 m), Gorordo (692 m), Orkatzategi (864 m), Saiturri (1.172 m), Aumategigaña (1.190 m), Maruatx (1.019 m), Andarto (1.064 m) y Andarto-txiki (848 m). Todo este conjunto forma un paisaje alpino.

La capacidad del embalse es de 10 hectómetros cúbicos que se utilizan para abastecer a gran parte de los municipios de la comarca. Pero además de su función digamos “oficial”, su perímetro de 6,4 km asfaltados ¡dan para mucho!:

-Para “running-maniacos”. Es un recorrido estupendo saciar a aquellos que han sido abducidos por la fiebre del running.

-Para pasear, patinar, o andar en bici tranquilamente, sin trafico. Durante algunos tramos del recorrido puede pasar algún vehículo autorizado para llegar hasta los caseríos que hay repartidos por el valle, pero suelen pasar despacio.

-Es el lugar perfecto para enseñar a los niños a andar en bicicleta o patines, casi sin peligro. Y digo casi, porque allí solo hay dos peligros: o atropellar a algún viandante o caer al agua. (¡Es broma!).

-Para hacer picnic. Hay multitud de bancos de madera por todo el recorrido y en la zona de servicio unas mesas con bancos ideales para ello. Pero si eres de esos “domingueros profesionales” que llevan la manta para ponerla en el suelo y el tiempo lo permite, hay zonas verdes donde puedes hacer un picnic en el prado. ¡Ojo! Si es éste tu caso, mira haber si no hay minas. No de las que explotan si no de las otras.

-Para que los niños, (y no tan niños), además de divertirse con las bicis o los patines, puedan conocer la naturaleza en estado puro. En los prados del valle, pueden ver ovejas (“latxas” por supuesto), vacas, caballos,… Además este enclave natural, también sirve de refugio para diversas especies de aves, que viven aquí o utilizan el humedal como parada en sus viajes de migración . Durante el recorrido hay colocados diferentes refugios o miradores de madera, más o menos camuflados, que sirven para el avistamiento de estas . Existen diferentes paneles informativos durante todo el recorrido que ayudan a conocer la fauna y flora del entorno con figuras de algunos animales. A los niños les encanta encontrar estas figuras y toquetearlas, ¡claro!.

-O simplemente, para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Los cantos de los pájaros, y las ovejas, las campanadas de las iglesias y algún que otro coche cuando llega, es lo único que oyes.

Cualquiera que sea tu opción, nada más llegar a Urkulu, y antes de ni siquiera ver el propio pantano, encuentras el palacio de Otalora, en el barrio o anteiglesia de Aozaratza (Azatza para los lugareños). Un palacio precioso que choca un poco en el entorno rural en el que está y que hoy en día es la sede social del Grupo Cooperativo Mondragón.

Si sigues la carretera, enseguida podrás ver el agua y todo el valle que lo rodea, una vista espectacular que sorprende a la mayoría de los visitantes que vienen por primera vez. Y no es para menos.

El parking está señalizado y es obligatorio estacionar allí ya que solo pueden pasar por el recorrido aquellos coches con autorización para acceder a sus caseríos. Te recomiendo que aparques el coche debidamente, porque aunque estés en un lugar aparentemente sin vigilancia, puedes encontrarte el papelito en el parabrisas del coche a la vuelta. Y aviso a navegantes, los únicos servicios y la única fuente que hay durante todo el recorrido están precisamente en este punto. En este área de servicio también puedes encontrar unas mesas con bancos de madera, para el picnic que he comentado anteriormente, que estamos en Euskadi.

Este es el momento en el que después de aparcar, abrimos el maletero y no paramos de sacar artilugios con ruedas: la bici, los patines, el patinete, … todo lo que te puedas imaginar. Con los niños, todo vale, porque si pretendemos hacer todo el recorrido sin cargar con ellos… Toca elegir y ¡en marcha!

Empieza el recorrido siguiendo el sentido en el que vienes en coche, hacia el barrio de Korueta. La primera parada obligatoria con niños está cerca y es un mirador muy chulo y atractivo para los más txikis (peques) de la familia.

Y enseguida encontraras un pequeño parque donde seguro que tendrás que hacer la segunda parada de rigor. Es por esto, por lo que no he puesto el tiempo que se tarda en hacer todo el recorrido. Como dice la canción… “depende, todo depende…” y más si vienes con niños.

Si algo tenemos en Euskadi es naturaleza. Naturaleza por los cuatro costados y eso mismo es lo que te vas a encontrar en Urkulu. No dejes pasar la oportunidad de visitar Urkulu, es el lugar ideal para alejarte del mundanal ruido y disfrutar del maravilloso paisaje bucólico. En familia como nosotros, o como tú quieras.

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Lo encontrarás aquí:

Información practica:

– Todo el recorrido está acondicionado para personas de movilidad reducida y carritos.

– El paso para coches está prohibido excepto para los que tienen autorización.

– El recorrido tiene marcado un “bidegorri” o carril-bici, solo para las bicicletas y resto de la vía es para todos los demás.

– En Urkulu hay unas normas que hay que respetar y que se aclaran en los paneles que hay en los accesos al recorrido. Muy importante, prohibido el baño.

– El único bar-restaurante de la zona está en el barrio de Aozaratza justo al lado de la iglesia (en la misma carretera de donde llegamos al pantano) y se llama “Matikua”. Un lugar ideal para tomar algo, picar unos chorizos caseros o comer de carta. Comida casera.

Matikua Restaurante

• Barrio Aozaratza nº 9 -Aretxabaleta 20550

• Teléfono: 943 79 16 68